Título original: Dances with Wolves
Año: 1990
País: EE.UU.
Duración: 173 min.
Director: Kevin Costner
Guión: Michael Blacke
Música: John Barry
Montaje: Neil Travis
Fotografía: Dean Semler
Productor: Kevin Costner y Jim Wilson
Compañía: Orion Pictures/Tig Productions
Intérpretes: Kevin Costner, Mary McDonnell, Graham Greene, Rodney A. Grant, Tantoo Cardinal, Robert Pastorelli, Maury Chaykin, Wes Studi et al.
Ganadora de 7 Oscar: película, director, guión adaptado, montaje, música, fotografía, sonido
Guerra
de Secesión. El teniente John Dunbar es un militar del ejército
confederado que, debido a una herida de guerra y en honor a los
servicios prestados, le encomiendan vigilar un fuerte en plena
frontera con el territorio de los sioux. Cuando llega allí descubre
que, más que un premio, lo que ha obtenido es un castigo: el lugar
está abandonado y la amenaza de los nativos es constante. Sin
embargo, al cabo de unos cuantos encuentros con los indios, Dumbar
descubre que estos no son como él creía, llegando incluso a
integrarse en una de sus comunidades.
Hay un sketch de "Muchachada Nui" en el que Frank Coconut, el
cómico zombi, enumera las ventajas de ser un muerto viviente. Una de
ellas es que, cuando va al cine, la gente se va corriendo y no tiene
que esperar cola, salvo si la película es de Kevin Costner, porque
entonces, directamente, no hay cola. Esta anécdota, lejos de ser
baladí, refleja perfectamente el estado de las cosas, pues Costner
ha pasado a la historia por ser un guaperas delante de las cámaras y
un pésimo realizador detrás de ellas. La excepción la encontramos
precisamente en su debut como director, que no es otro que "Bailando
con lobos", una de las películas más bellas que jamás he
visto.
El
filme narra una historia de mestizaje, de fusión de culturas, de
tolerancia con otra raza y otro mundo. Seguro que esto os suena a
cierta película rodada en 3 dimensiones y protagonizada por
personajes azules con aspecto extraterrestre. Y no vais
desencaminados, pues, si hay algún filme al que "Bailando con lobos"
se parezca, ese no es otro que
"Avatar". Sin embargo, pese a las similitudes
entre ambas cintas, la película de Costner es, a mi juicio, superior
a la de Cameron, pues cuenta con un guion menos maniqueo (basado en
una exitosa novela) y carece por completo de efectos visuales, con lo
que todo se deja en manos de los actores y los escenarios naturales
en los que fue rodada. Además, se nota que al director le
apasionaba la historia, pues los planos de “Bailando con lobos”
están cuidados al milímetro, logrando una película narrativamente
muy sólida y que, a pesar de los 180 minutos que dura su versión
cinematográfica (la versión extendida alcanza las 3 horas y
media), no se hace pesada en ningún momento.
Por
lo que respecta al reparto, destacan por encima de todos dos nombres.
Por un lado, el propio Kevin Costner, sobre el que recae todo el peso
narrativo de la cinta: la primera hora y media de metraje (formada
casi en su totalidad por escenas en las que únicamente vemos en la
pantalla a John Dunbar) no es más que un monólogo actoral de
Costner, quien saca a relucir su mejor repertorio dramático para
demostrar que su implicación en la película va más allá de lo
puramente profesional. Por otro, tenemos a Graham Greene, actor con
nombre de escritor nacido en Canadá y que sorprende con un perfecto
acento indio, en una interpretación que le valió una nominación al
Óscar como mejor actor de reparto. Otros aspectos dignos de
mencionar son la preciosa música de John Barry (cuyo tema principal ya es un clásico de la música de cine) o la hermosa fotografía de
Dean Semler, las cuales ayudan a que "Bailando con lobos"
sea la gran película que es.
Sin
embargo, al igual que pasó con "Gente corriente" -también
la ópera prima de un actor-director- un filme netamente superior
–también de Martin Scorsese- se quedó sin premio: "Uno de
los nuestros", posiblemente una de las cinco mejores películas
de la historia. Por ello, y pese a que -"Bailando con lobos"
es un largometraje sobresaliente que trata un tema muy interesante,
su Oscar a la mejor película me parece totalmente inmerecido.
by Chuparrocas
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